EL DESARROLLO DEL COMERCIO, SU DESPLIEGUE A NIVEL LOCAL
Pando y
Cobija en particular, desde sus inicios como Territorio Nacional de
Colonias, estuvo vinculada al comercio internacional, solo que en base a
la explotación de recursos naturales: primero goma y luego castaña. Fue
el centro de abastecimiento de productos importados de Europa y Estados
Unidos para el mantenimiento de la empresa barraquera.
Los incentivos al Comercio regional
La
dinamización de la economía regional tuvo en el comercio su principal
foco de atención bajo el supuesto que la región requería de nuevas
actividades económicas, complementarias a la
tradicional explotación
de recursos naturales y que además posibilite la mayor inserción de
unidades económicas y un significativo efecto multiplicador en los demás
sectores de la economía regional. a. Cobija y la declaratoria de Puerto
Libre
En septiembre de 1965, mediante Decreto Ley Nº 07338, se crea
una zona franca de importación y exportación de mercaderías en la
ciudad de Cobija, con el propósito de beneficiar a todas las poblaciones
del departamento, al estar exentos de pagos de todos los impuestos
arancelarios.
Transcurridos pocos meses de dictada la norma, en
Cobija comienzan a establecerse comerciantes importadores de origen
nacional y descendientes judíos, dando inicio a la importación de
mercaderías consistentes principalmente en textiles de primera calidad,
materiales suntuarios, artefactos transistorizados y otros.
Si bien no se dio un cierre oficial del Puerto Libre, sus operaciones fueron suspendidas
principalmente debido a escandalosos casos de contrabando hacia el interior del país.
b) Un segundo intento, la Zona franca industrial y comercial de Cobija
En octubre de 1983 se crea la zona franca industrial y comercial en Cobija, los rasgos esenciales de
su alcance son: a) la exención de impuestos creados o por crearse, b) el principio de
extraterritorialidad
aduanera o ficción de tipo legal, a partir del cual se asume que las
mercaderías no pagarán ningún tipo de gravamen y c) la zona franca
comprende toda el área urbana de la ciudad de Cobija.
Posteriormente,
el 7 de abril de 1998, mediante la Ley Nº 1850 se amplía la vigencia de
la zona franca por veinte años más, es decir, hasta el 2018. En octubre
del año 2000, mediante el Decreto Supremo Nº 25933, se aprueba un nuevo
Reglamento para la zona franca de Cobija, que tiene por objeto
“establecer las normas tributarias, operativas, organizativas y
administrativas necesarias para el eficiente funcionamiento de la Zona
Franca Comercial e Industrial” y constituye un elemento dinamizador de
la actividad comercial para el periodo siguiente.
Se puede decir que esta norma constituyó el factor de aceleración para el crecimiento del
comercio, pues permitió el incremento de ganancias y a su vez el crecimiento del capital
comercial.El comercio desde la zona franca, fases de su crecimiento
Han
tenido que transcurrir casi 3 décadas para que el comercio importador
logre consolidarse como uno de los pilares de la economía local, de los
cuales los trece primeros años podrían ser
caracterizados como de crecimiento; los siguientes siete, de consolidación y los últimos ocho, de expansión.
Primer periodo: El crecimiento (1984 – 1997)
Este
periodo fue marcado por el crecimiento del comercio, expresado en el
número de unidades comerciales importadoras que se fueron estableciendo
en la ciudad, las vinculaciones cada vez más fluidas que fueron creando
con espacios trasnacionales y los dispositivos socioculturales que
pudieron desplegar en este primer periodo.
En principio las tiendas
comerciales se fueron erigiendo en espacios alquilados de antiguos
moradores de la zona central de la ciudad, y “naturalmente” fueron
tomando la vía principal como la Avenida Tcnl. Cornejo; a este tiempo,
muy pocos contaban con infraestructura propia. A mediados de la década
del 90, los comerciantes fueron comprando los inmuebles que alquilaban,
generando a su vez, un desplazamiento de los antiguos moradores a otras
zonas de la ciudad.
El dominio en propiedad de los espacios
destinados al comercio significó posteriormente la posibilidad de
acceder a financiamiento a través del sistema de garantías hipotecarias.
Permitió además la ampliación o adecuación de los espacios que ocupaban
para extender su capacidad de operaciones.
Al término de la década
de los 80, en el marco del incentivo de la zona franca, se inician los
viajes al extranjero, principalmente a Chile, específicamente a la
ciudad de Iquique, para comprar mercaderías variadas entre ellas
electrodomésticos, bebidas, relojes y perfumes y de esta manera se
inician la diversificación de la oferta de productos y se configura una
nueva característica del comercio local.
En este periodo el
comerciante transitaba entre dos líneas de comercio, por un lado, el
comercio de productos provenientes del mercado nacional y orientado al
mercado local; y por el otro, el comercio de productos importados de la
ciudad de Iquique orientados a un mercado macro regional, que incluía
municipios de Brasil.
Pasados los años, los comerciantes fueron
adquiriendo conocimiento, que habían acumulado durante sus primeros
viajes, e inician las “compras en conjunto”, este mecanismo, busca por
un lado minimizar costos e incrementar sus beneficios, y por otro lado,
recupera, la lógica del ayni, del trabajo conjunto, presente en la
cultura sociocomunitaria de los comerciantes migrantes de occidente,
todos ellos con vinculaciones de tipo familiar y simbólica.
En este
primer escenario donde el comercio Cobijeño, se encuentra en fase de
crecimiento, con capitales de pequeño porte, jugó una papel relevante la
figura del “prestamista” al que se acudían para acceder al capital
faltante. Los préstamos otorgados de manera inmediata, sin garantías
hipotecarias sino simbólicas, fuera de cualquier marco regulatorio,
posibilitó el acceso a capital dearranque, la compra de terrenos, la
construcción de infraestructura y por consiguiente, el dinamismo
creciente que tomó la actividad comercial.
A partir del segundo
quinquenio, movidos de cierta manera por el comercio, se inicia la
apertura de agencias de entidades financieras como PRODEM (1997) que
orientando su cartera entre otros al comercio, jugó un papel importante
en la dinamización de diferentes sectores económicos a nivel local.
En
este primer periodo, el “negocio” tenía una débil estructura
administrativa, con poco personal y la mayor parte constituían los
familiares en diferentes niveles de parentesco, muchos de ellos, traídos
directamente para trabajar en el comercio.
Por las características
que adopta el negocio en este periodo, los propietarios cumplían
diferentes funciones, desde comprador, administrador, vendedor hasta
cargador; en la lógica de minimizar costos, para por un lado, cumplir
con los compromisos de pago y para crecer, por otro. Un componente
esencial en la reducción de costos, fue la eliminación del costo de mano
obra incorporando el aporte familiar que se regía bajo acuerdos de
“apoyo” que posteriormente serían recompensados.
Un aspecto central
en este periodo es la presencia mayoritaria de los comerciantes que
venían del occidente del país y específicamente de Maramara,
departamento de Oruro.
Segundo periodo: la consolidación y monopolio (de 1998 a 2004)
Este
periodo es marcado en sus inicios por la ampliación del periodo de
vigencia de la Zona Franca, que genera un nuevo ámbito de acción a
través de su reglamentación y por los cambios en la forma de
organización e inserción en el mercado internacional. Se lo denomina de
consolidación por las características que asume la unidad comercial, por
sus vínculos económicos y el incremento en el volumen de las
mercaderías comercializadas; en este periodo también se expresan
características de control monopólico por grupos económicos en
emergencia.
En este periodo los comerciantes establecen nuevos nexos
comerciales con proveedores ya no sólo de Iquique sino también de
Brasil, Estados Unidos de Norteamérica y Panamá, movidos por el deseo de
aprovechar la demanda de un mercado potencial en franco crecimiento
como el del vecino país, Brasil. La prospección de mercados y la
comparación de sus ventajas orientaron la toma de decisiones, como
muestra de un mayor conocimiento sobre el funcionamiento del mercado
externo.
El dominio del conocimiento sobre las relaciones comerciales
condujo a los comerciantes a efectuar las compras directamente por
ellos mismos, especialmente por quienes lideraban los grupos de compra,
lo que hizo prescindir por completo de la figura del intermediario o
“guía”, en esta etapa.
Dado los volúmenes de capital que se movían en
el comercio, estos generaron excedentes que fueron por un lado
reinvertidos en el crecimiento del propio negocio, como también
direccionados hacia otros sectores de la economía local. La construcción
de infraestructura comercial y la compra de mayores volúmenes de
mercadería, constituyeron la prioridad de la inversión.Para algunos,
mejor dicho los primeros importadores este periodo fue caracterizado
como el “boom” del comercio, por el monopolio que se estableció en torno
al mismo, que significó un movimiento de capital importante en pocas
manos.
La distribución del mercado de Cobija es hegemónica, ya que
está conformada por “clanes” que actúan en este rubro del comercio, los
migrantes orureños (Villca y Condori) y los paceños (Barreto) en segunda
instancia, con participación minoritaria de otros departamentos.
Tercer periodo: la expansión (2005 ‐ 2011)
Dos aspectos marcan este periodo, en primera instancia la implantación de las boletas de
garantías
para todo trámite de importación con tránsito en territorio nacional, y
segunda, la ampliación de la exención del pago del Impuesto a las
Utilidades‐IUE, a las empresas comerciales asentadas en la zona franca.
La
primera genera una supuesta eliminación del sistema de compra conjunta
por el hecho de que cada importador debería contar con su boleta de
garantía, lo que en los hechos no fue así. Se siguieron dos rutas en
este sentido: en uno estaban quienes, además por sus volúmenes de
capital alcanzado, podían fácilmente acceder a las boletas y efectuar
sus compras de manera independiente, y en la otra, quienes aún no podían
disponer libremente del monto de la garantía y se veían obligados a
agruparse o a “colgarse” bajo la garantía de otro comerciante.
Este es un periodo de expansión en número, pero sobre todo de extensión de los vínculos
comerciales,
en el que además de fortalecerse las vinculaciones existentes con
Chile, Brasil, Norteamérica y Panamá se amplían hasta China e India,
siguiendo la dinámica del comercio globalizado.
Los vínculos se
establecieron de manera individual, quienes cuentan con mayor capital
pueden comprar directamente de fabricantes chinos y en cantidades
mayores, pero el mercado es pequeño para la compra en contenedores. Pero
el conocimiento adquirido por los comerciantes sobre las ventajas de
cada uno de los mercados les permite jugar con diferentes opciones y
establecer sus estrategias de aprovisionamiento considerando tiempos,
condiciones, precios y la demanda del mercado consumidor.
REDES SOCIALES, EL SOPORTE PARA EL COMERCIO
En
los comerciantes importadores es posible admitir que el conjunto de sus
relaciones sociales facilitaron la migración hacia la región, como
también sustentaron el crecimiento del comercio, en el entendido que a
través de los vínculos existentes en sus lugares de origen, así como los
que se crearon en el nuevo contexto, fueron fundamentales para el
inicio, crecimiento y consolidación de las unidades comerciales.
Las redes sociales en el proceso migratorio
En
el caso de estudio, la migración fue un factor de gran soporte para el
crecimiento del sector comercial, pues lo integran personas provenientes
de diferentes regiones del país, así como del vecino país de Brasil,
que expresan una heterogeneidad en cuanto a cultura, visiones,
propósitos yestrategias desplegadas. Entre ellos, sobresalen los
orureños y paceños por sus características socioculturales y la densidad
de sus relaciones sociales al interior de cada grupo.
Una conducta
que marcó la apertura de los entornos sociales a los nuevos migrantes y
su incursión en el comercio fue la construcción de relaciones de amistad
con personas oriundas del lugar.
La característica primordial de este sector vendría a ser los vínculos fuertes formados por
familiares y amigos íntimos, a través de los cuales los miembros de la red realizan juntos
diferentes
tipos de actividades de una manera más segura y confiable, debido a la
proximidad familiar. Esta cercanía posibilitó el acceso a servicios y,
especialmente, trabajo. Las redes sociales y el comercio importador
La
actividad comercial dentro de la Zona Franca de Cobija, ha tenido
momentos importantes en el trascurrir del tiempo, identificándose tres
periodos que marcan, desde el enfoque diacrónico, su desarrollo. Para
cada uno de estos periodos se han identificado características
esenciales de las redes sociales y su contribución al desarrollo y
consolidación de lo que hoy se muestra como una
de las principales actividades económicas dentro del departamento.
• Para el primer periodo (Desde 1984 hasta 1997)
El
inicio del comercio de importación como tal, estuvo a cargo de personas
que migraron del occidente del país, especialmente provenientes de los
departamentos de Oruro y La Paz. La particularidad entre los orureños,
es que, a partir de una persona se genera toda una cadena migratoria
conformada por parientes y paisanos. Ésta jugó un papel fundamental en
el inicio del comercio.
Estas redes se fueron formando y
consolidando, a medida que incrementaba el número de personas que
llegaban del interior. Estos hombres y mujeres se hallaban vinculados
unos con otros por diversos lazos personales fundamentalmente vínculos
familiares, de parentesco, de amistad o de paisanaje.
Desde el inicio
los primeros migrantes trajeron consigo a sus familiares y paisanos
para que les ayudaran a consolidar una cierta posición económica, para
ello tenían que hacer desplegar una serie de estrategias que consistía
desde pagar el viaje, alojarlos, ayudarles a establecerse o apadrinarlos
ante otras personas.
Estas redes en su mayoría se han ido
consolidando a nivel del núcleo familiar, para posteriormente ir
uniéndose a una red más amplia que aglutina a la mayoría de personas
provenientes de un mismo lugar, esta red se amplía en el sentido que
todos son conocidos y están unidos por vínculos sanguíneos, pero también
simbólicos, para ello un ejemplo claro, es el de los orureños que como
se menciona la mayor parte proviene de una misma región.
Al inicio de
la actividad comercial las redes de estos comerciantes tenía la
característica de ser vertical, puesto que la mayoría trabajaban como
ayudantes, vendedores o encargados de la tienda, bajo dirección de una
sola persona quien era el propietario del negocio. Estos trabajadores en
su mayoría eran familiares o conocidos del “dueño”, quienes gozaban de
su confianza. Desde el primer momento, las redes sociales aportaron al
crecimiento de la actividad comercial facilitando la apertura de los
nuevos emprendimientos, caracterizados en primera instancia por el
trabajo conjunto, “en grupos”; grupos como de “la cornejo”, o el de “los
orureños”, o el “grupo
Barreto”, entre otros, dentro de los cuales
despliegan una serie de estrategias de crecimiento y de “conservación”
para mantener una tendencia creciente de su emprendimiento y una
presencia consolidada en el contexto comercial local.
Otro punto a
destacar es que desde el inicio se hace evidente la participación de las
mujeres como nexos fuertes en la actividad comercial. Esta
participación se evidencia en la conducción del negocio, ya sean como
generadoras de capital o como directas responsables, por lo que se hace
indispensable mencionar la importancia que adquieren dentro de las
actividades comerciales.
Muchas de las mujeres han trabajado en la
misma proporción como lo hacían los varones, enfrentando las mismas
condiciones de trabajo que requerían de esfuerzo, sacrificio y
dedicación de todo el grupo.
• Segundo periodo: desde 1998 hasta 2004
En
el segundo momento que se dio en el comercio importador de Cobija las
redes sociales alcanzaron su máximo desarrollo, ya que diferentes
factores tales como: la unión, la cooperación y la ayuda mutua, han
contribuido en la creación del capital social al interior de estas
redes.
Para este momento las “redes horizontales”, se muestran de
manera más evidente, ya que fue el periodo donde se fortaleció el
trabajo de equipo, principalmente entre los grupos de orureños y
paceños. En los demás comerciantes (pueden ser estos locales o de otros
departamentos del país, así como brasileños), su forma de trabajo no es
principalmente corporativa, sino individual.
Los orureños y paceños
trabajaron bajo la lógica de “compras conjunta”, para ello se
organizaron en grupos, donde compartían los gastos de transporte,
alimentación y estadía durante el viaje.
Quienes contaban con mayor
capital, adquirían mayor cantidad de mercadería, y los que tenían menos
capital eran ayudados por los demás; esta ayuda consistía en no aportar
para el pago del transporte o hasta no viajar y pedirle a otros que “se
los compren” para de esta manera no incurrir en gastos extras; estas
estrategias se desplegaron hasta que lograron alcanzar un nivel
económico más elevado.
Generalmente se trataba de dos o tres personas
que lideraban la compra en virtud del capital que tenían, el
conocimiento ganado sobre la dinámica comercial y los contactos
establecidos, estos nexos centrales de la red hacían circular recursos e
información al interior de la misma y al mismo tiempo, facilitaban el
establecimiento de nuevos nexos, principalmente económicos, necesarios
para el funcionamiento, mantenimiento y crecimiento de la red.
• Tercer periodo: Desde 2005 hasta 2010
Lo
que marca el paso de un periodo a otro es precisamente el
funcionamiento de las redes sociales, que hasta aquí habían sustentado
un crecimiento y que entran en una etapa de contradicciones en el
sentido que se vuelven dispensables. Dado el crecimiento económico
alcanzado por los nexos de las redes, ha motivado una mayor autonomía en
torno a compras y manejo del propio emprendimiento.Este periodo
presenta características en sus vinculaciones las cuales han bajado en
intensidad,
puesto que a partir del crecimiento que ha venido
desarrollando cada comerciante, ya no existe ese trabajo en grupo tan
evidente que se ha generado en los dos primeros periodos, nos referimos
entonces a los importadores de zonas andinas, razón por la cual el
trabajo comercial se está realizando de forma individual, es decir un
propietario de una casa comercial es responsable de contratar personal
para trabajar a su cargo, significando que su red se está ampliando de
manera vertical, con sus trabajadores que lo colaboran.
Sin embargo
en este periodo, un sector importante que ha cobrado significancia, son
los que se están consolidando, tal es el caso de los locales, brasileños
y hasta quienes provienen de distintas regiones del país, (Santa Cruz,
Potosí, Cochabamba y otros ), ya que en este último periodo la
participación de estos ha ido en aumento, sin embargo mantienen la
característica del trabajo individual o en su defecto reciben la
colaboración solamente de sus familiares (que pueden estar o no
involucrados en la actividad comercial), quienes son el soporte
principalmente económico.

La Zona Franca Comercial e Industrial de Cobija. Es una entidad Pública del Estado plurinacional de Bolivia, se encuentra en la región norte de Bolivia en la Capital de Cobija departamento de Pando. Caracterizado por ser la Zona Franca más grande de Bolivia. Por comprender todo el radio urbano de la ciudad de Cobija. Además de estar ubicada en la frontera a Brasil estado de Acre y a una distancia de 70 Km, del Perú.
martes, 21 de octubre de 2014
Reseña Comercial Zofra Cobija
Etiquetas:
bolivanos,
bolivia,
boliviana,
bolivianos,
chat,
Cobija,
email,
geografia boliviana,
historia de bolivia,
madera,
Marco A. Fernandez,
news,
noticias,
noticias de Bolivia,
pandinas,
Pandinos,
Pando,
ríos
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario